Cierto es que la posibilidad de perder lo ya ganado nos atenaza y mucho. Pero no es menos cierto que otros, con menos ataduras e ideas más frescas, ya vienen pisando fuerte
no te condenes al fracaso, no te limites a ti mismo.
¡Internet no tiene fronteras... la frontera es tu imaginación.
Por supuesto eso no significa que cualquier idea valga, probablemente no, quizás no de la forma original en la que tú la pensaste, pero es posible que la base de tu idea si merezca un esfuerzo con el fin de ponerla en práctica.
Es difícil, lo sé, nadie dijo que lo original y exitoso fuese fácil, si así fuese ¿no crees que ya lo hubiese hecho otro?
Pero precisamente no por ello deja de ser menos imprescindible para nuestro negocio la necesidad de ser más innovadores que la competencia.
Por desgracia, y así la historia lo confirma, por lo general los empresarios españoles hemos sido muy poco dados al riesgo que conlleva la innovación.
Sin embargo, es esta innovación la que siempre acompaña a los negocios que triunfan.
Lo cierto es que habitualmente no prestamos atención a lo que otros ya ponen en práctica. Concretamente en el caso de Internet y sin que la situación sea extrapolable al 100%, pero si las ideas básicas (con sus variantes adaptadas al entorno de nuestra sociedad), resulta que EEUU nos muestra continuamente, y con dos años como mínimo de adelanto, el camino a seguir.
Pero la reticencia y el escepticismo nos invaden.
Frases conocidas como... "Ya, pero eso es en EEUU, aquí no puede funcionar", están a la orden del día.
Muy probablemente, si a estas personas se les mostrara la relación de inventos y costumbres americanas que hemos incorporado a nuestra vida cotidiana, con bastante seguridad, la próxima vez meditarían la frase un poco más antes de pronunciarla.
Esta actitud de "miedo al cambio" o de "resignación al inmovilismo", es habitual en el comportamiento humano.
Pero también es cierto que el empresario debe luchar contra ello si desea hacer crecer y fortalecer su negocio.
Por supuesto que hay que meditar mucho las inversiones y los riesgos, pero lo importante es la perspectiva desde la que uno se enfrenta a una nueva idea.
La situación cambia radicalmente entre partir de un no a un es posible, y vamos a analizar los pros y los contras lo más objetivamente posible, y sin prejuicios iniciales.
Cierto es que la posibilidad de perder lo ya ganado nos atenaza y mucho. Pero no es menos cierto que otros, con menos ataduras e ideas más frescas, ya vienen pisando fuerte. Y ya sabemos, o debemos saber, que en Internet valen bastante más las buenas ideas que el dinero.
Verdaderamente, si nos preocupáramos de hacer un análisis sobre las inversiones poco rentables que realizamos al cabo de un año nos sorprenderíamos.
¿En qué y cuánto he gastado sin necesidad?
No es posible que nos planteemos menos la necesidad del gasto de determinados elementos de uso diario (decoración de instalaciones, coches, publicidad sin planificación alguna, etc...) que la de la inversión de poner en marcha a través de Internet planes de expansión, y a la vez de defensa frente a la competencia que ya está empezando a llegar.
Lo cierto es que es como en el cuento. ¡Qué viene el LOBO! ¡Qué viene el LOBO!
¡Pero cuidado que este LOBO corre que se las pela!
Hay una frase que siempre me ha impactado y que refleja una realidad: Se pierde más dinero por indecisiones que por decisiones equivocadas.